"La
Adoración de los Magos" (1609) de Pedro Pablo Rubens. |
La tradición de regalar juguetes a los
niños es de hace un siglo. Antes los regalos eran simbólicos y podían no
existir en las clases humildes. Solían ser golosinas, adornos y prendas de
vestir. Ahora los Reyes regalan libros, vestidos y sobretodo muchos juguetes. No
podemos hablar de los juguetes sin referirnos al juego que les otorga su sentido
y finalidad. Los niños de cualquier latitud juegan y le gusta jugar, ya que
esto les brinda placer y alegría.
Las consideraciones acerca del juego varían entre los especialistas en la
materia. Sin embargo la mayoría coincide en que el juego sirve a propósitos
eduactivos y tiene gran importancia en el desarrollo de las capacidades
creativas de los niños. Además lo consideran un medio eficaz para el
conocimiento de la realidad. En sus juegos, el niño refleja la vida que le
rodea, adquiere y precisa conocimientos. A través del juego se
"entrena" en el desarrollo de actividades futuras, "es el modo de
aprender con que la naturaleza ha dotado en esta primera fase de la vida a todo
ser que ha de crecer...."
Tomando la clasificación que Lilian Scheffler hace de los juguetes,
vemos que actualmente existen tres diferentes tipos:
a) Los populares tradicionales, elaborados por artesanos de diferentes regiones
del país.
b) Los educativos, utilizados para que el niño aprenda a desarrollar sus
capacidades psicomotrices.
c) Los comerciales, de producción masiva, que se venden en diversos
establecimientos, promovidos por fuertes campañas publicitarias a través de
los medios de comunicación, y que fomentan el consumismo.
En vísperas de navidad, los niños empiezan a soñar con el juguete deseado y
comienzan a imaginar al popular "Papanoel" llegar el día de Navidad
con el regalo que ellos tanto anhelaban. Sin emabargo es importante recalcar a
los padres que no solo les regalen a sus hijos juguetes puramente
electrónicos (los cuales en el la mayoría de los casos, diluyen la
imaginación y los convierten en meros espectadores), sino también aquellos
juguetes manuales en los cuales los niños puedan ejercitar y desarrollar sus
capacidades. De ahí la importancia de revalorar el juguete tradicional,
que implica una actitud más activa para el juego y supone, además, fortalecer
lo nuestro, nuestra identidad.
Los Magos de Oriente, llegaron con regalos a vistar al niño Jesus el
día 25 de Diciembre y aunque nada se dice en los Evangelios al respecto, la
tradición dice que los Magos eran además Reyes y que eran tres: Melchor,
Gaspar y Baltasar. Asimismo, Melchor lleva barba blanca, Gaspar castaña y
Baltasar es de piel muy oscura.
Para solicitar el juguete deseado, los niños escriben una carta a los
Reyes, o Papanoel, carta que entregan en mano a ellos o a los Carteros
Reales con anterioridad al día 25 de Diciembre, día en el cual llegará el
ansiado regalo, sin embargo en la mayoría de los países europeos, se
entrega los regalos el 5 de Enero, justamente conmemorando la vista de los reyes
magos al niño Jesús. En estos otros países el 5 por la tarde es la llegada
oficial de los Reyes, formándose una cabalgata en la que éstos pasean por
las calles de las ciudades montados en camellos y acompañados de personajes
populares infantiles, animales del zologico y (por supuesto) con sus camellos
cargados con los juguetes que repartirán por la noche, aunque solamente a los
niños buenos. A los que no se portan bien, les entregan un saco lleno de
carbón.
En todos los países cristianos hay regalos para los
niños: en Navidad, bien los trae el propio Niño Jesús cuando nace,
bien los trae Santa Claus (o Papá Noel, desde el Polo Norte) o San Nicolás. El
6 de enero (la Epifanía) llegan los Reyes Magos desde Oriente. Como ves todos
ellos proceden de lugares muy lejanos respecto al país dónde llevan los
regalos. Llegan en trineo de renos, barco o camello. En otros casos los regalos
aparecen junto a un tronco de leña que se quema en la chimenea, etc, etc. Pero,
afortunadamente, siempre se intenta que haya regalos (dulces o juguetes) para
todos los niños.